lunes, 7 de enero de 2008

Afonía Cabalgatera


Bueno... realmente no salgo demasiado favorecido en la foto... parece que peso 10 kilos mas de los que tengo realmente jejeje no obstante la foto es buena. Es la única que he encontrado en Internet y espero que a su autor no le importe que la utilice en mi blog. Para calmarle, por si se mosquea, os dejo aquí la dirección donde la encontré. Sin animo de pelotear más de la cuenta tiene muy buenas imágenes así que pasaros por allí:

http://www.flickr.com/photos/n30n6o0/2171776674/


¿La cabalgata? Buff... demasiado... jamás he actuado para tanta gente y dudo que lo vuelva a hacer, nos os podéis imaginar lo que se ve desde encima de una carroza...

Bueno empecemos por el principio que es por donde hay que empezar. Mentiría si no confesase que estuve nervioso desde que me levanté, esos nervios que tengo siempre el día que sé que tengo que actuar, pero realmente no sabía aún a lo que me enfrentaba puesto que nunca había salido a enfrentarme a tamaña masa de gente. Controlé los nervios como siempre, pirandome al bar de confianza con el Gran Chema y distrayendo mi atención con cervezas que aun no había probado. No comí a medio día. Cuando llegué a casa a eso de las 3 me duché, arreglé la barba y después de vestirme, casi sin planteármelo, empecé a tomar consciencia de mi personaje , puse Ramsteim mientras me miraba en el espejo y pensaba en mi como guerrero sumerio, en mis batallas y cicatrices... ayudaba la música... de vez en cuando saltaba mientras ponía cara de mala leche... en pleno ardor cojo una de las espadas que adornan mis paredes y corto el aire... ese silbido también ayuda.

Me recogen en mi portal, más Ramsteim en el cd del coche y llegamos a mi parte favorita antes de cada actuación: Camerinos. Normalmente es donde ya los nervios terminan por estallar, máxime cuando he visto que la gente, 2 horas antes, empieza a llenar las calles de Granada, pero no, estaba flipando tanto, con tanto actor disfrazado que no paraban de salir a medio disfrazar, tanta prisa, ¿donde están mis caramelos?, gente que sale y que entra, - "guardar vuestra ropa en una bolsa con vuestro nombre y luego la recogéis en el ayuntamiento" - no paraba de gritar un tal Rafa, más prisa, yo que me empiezo a desnudar para ponerme el disfraz, mientras no pierdo detalle de lo que hacen los demás y no encuentro mi lanza, que discreta no es, joder, se me caen las polainas, gracias preciosa astróloga por ayudarme... ¡leches que todavía no estoy maquillado!, ¡bien! mi lanza está ahí... entro a maquillaje, - "la ropa... nombre... bolsa... ayuntamiento..."- joder de esta guisa me van a confundir con el de William Wallace bromeo cuando me maquillan de azul, .... ¡Libertaaaaad!.... alguien grita en la habitación contigua...


Estoy a punto de salir a la calle para montarme en mi carroza con los niños... tomo aire y para delante... ya soy un guerrero sumerio...


Salgo.

La gente me abre paso cuando, con paso firme, me encamino a la carroza, algún niño se asusta al verme pasar...

Monto en la carroza y doy las ultimas instrucciones a los niños. Un encanto de niños la verdad, a los que, si leen esto, reciban mi cordial saludo y agradecimiento... "Joder lo que tarda la carroza en ponerse en marcha...", me informan que al elefante que abre la cabalgata le se ha puesto peligroso y lo están retirando, por eso el retraso... "¡la carroza de delante se mueve, se mueve!" me informan los niños... es cierto.. esto empieza...
Se supone que tenia que tener un par de gestos preparados para cuando la carroza estuviese parada... yo tenia pensado algo, pero la verdad es que dudaba que funcionase por que contaba, demasiado a priori, con la participación ciudadana... joder... funcionó.

Grité, arengué, a las tropas y unas 100.000 personas, creo que me quedo corto, sin bromas, gritaban conmigo. ¡EHHHHHHHHHH! me desgarraba la voz, ¡EHHHHHHHHHHHH! me respondía el publico con los brazos en alto. La grima venía cuando tropezaba con algún nostálgico al que no se le puede dar la oportunidad inocente de alzar el brazo, ni siquiera en una cabalgata... pero bueno... ojos que hacen como que no ven... ¡EHHHHHHHHHHHHHHH! picaba al publico de ambos lados entre si a ver quien gritaba más...

Esto se alarga y voy a recortar, durante el trayecto todo impresionante, estuvo a punto de darme un chungo por gritar tanto y me tuve que empezar a relajar y limitarme a tirar caramelos, Dieguito les vacilaba a sus compañías femeninas de que me enardecía su ardor Guerrero, entré al trapo y lo pase bien... Niños cabrones que me querían saltar los ojos a caramelazos, niños impresionadísimos cuando los saludaba directamente, te miraban como si viesen algún ser mágico... eso fue lo mejor... psicópatas de corbata que se aporreaban entre si por un par de caramelos, ancianas que se metían debajo de la carroza con el mismo fin a pique de ser atropelladas... Cada diez metros una historia...

Al día siguiente en el rotativo Ideal... "... un William Wallace que arengaba al personal..."...

William Wallace no tiene barba tíos...


Llevo dos días con afonía.

3 comentarios:

lurulú dijo...

tío sabes que me muero de envidia, sana, pero envidia xD yo quiero ser una guerrera sumeriaaaa. jejeje, enserio espero que sigas así.
:)

carmela dijo...

olé ese guerrero sumerio. Me alegro que te lo pasaras bien, de eso se trata, cuántas cosas te quedan por ver y vivir en este mundo teatral , casi mágico, ya te iré mandando cosas para que te presentes y pruebes. besitos.

Angel M.C. dijo...

Saludos William:
Yo soy el que te echó la foto, y la verdad que no fue fácil, porque no te estabas quieto ni un segundo gritando de un lado para otro. A mi tu actuación me encanto.

No te preocupes por utilizar mi imagen, si te das cuenta lleva una pequeña firma.

Si la quieres en grande, nada más que pedírmela ^^